Mi mejor amiga esta mañana |
Madrid. 22:30 de un miércoles. Tres compañeras de piso se disponen a atacar un bufete libre japonés que la CM del piso ha encontrado por Internet. Uno de cientos, pero este cerca de casa y con un encanto tan especial como espeluznante. El Sumo San se encontraba ante nosotras. Sus puertas abiertas y su cartel en la entrada con el suculento mensaje de "bufete japonés de calidad" hicieron rugir a nuestros estómagos tan fuerte que hasta León de la Riva, acurrucadito en su rincón, se asustó desde Valladolid.
Un camarero (muy poco japonés) nos sentó en una mesa muy maja. Ojo, para todos los que ven un sofá en un restaurante y corren a sentarse: aquí también los hay, echadlo a suertes. Eso sí, son de esos de plasticurri, así que se os pegará el pantalón al culete. Por lo demás, la decoración sencillita y agradable, las vajilla muy monas y los palillos chinos muy poco útiles, lo de siempre. Si sois muy frikis, enhorabuena. Si no lo sois, pedid un tenedor.
La carta básica |
A nosotras, cono no podía ser de otra manera, se nos fue de las manos. Desde makis, california roll o temakis, pasando por la tempura de verduras, ramen con carne (sopa con fideos largos), yakitori de todo tipo (son como brochetas de cosas), tepenyaki (cosas a la plancha con una salsa muy rica)... Y como todo el mundo puede imaginarse, no pudimos con todo. Una cosa que me gustó especialmente y que pedí gracias a mi parte friki, fue el oyakodon. Es un plato que aparece en algún libro de Haruki Murakami, escritor al que amo. El plato en cuestión es un bol de arroz cocinado con cebolla, pollo y más cosas y salsas y de todo un poco... Todo eso coronado con un pedazo de huevo frito. Estaba muy rico, pero cada vez que me acuerdo me muero un poco de empacho.
Moriawase ramen o sopa de verduras con espaguetis |
Por resumir:
- Precio: 15,50 € (obligatorio consumir una bebida) Bien
- Lugar: bonico (Modesto Lafuente, 88 - Metro: Nuevos Ministerios)
- Comida: bastante rica
- Servicio: el chico no era japonés pero era muy majo
- Música: muerte y destrucción. Lesión de oído
- Satisfacción general: mucha. Hasta el vómito.
- Lugar: bonico (Modesto Lafuente, 88 - Metro: Nuevos Ministerios)
- Comida: bastante rica
- Servicio: el chico no era japonés pero era muy majo
- Música: muerte y destrucción. Lesión de oído
- Satisfacción general: mucha. Hasta el vómito.
- Recomencación: no comer en una semana y tomar omeprazol
Quiero que compartáis conmigo el dolor que sentí ayer, así que aquí os dejo un hitazo.